Mareas muertas y la hora perfecta para tirar al coral de Teno con plena seguridad de no pillar las tan temidas corrientes de la zona. Lo mejor, encontrarnos a esta simpática pareja de caprélidos (como diría Javi, gracias!!), camarones esqueleto (como diría David Barrio), camarones fantasmas (como dicen otros) o «Bichos palo» como decimos Adrián y yo. Saludaron a cámara muy amablemente así que, a pesar de su apariencia fantasmagórica no creo que sean tan malos. Para los que no conozcan la especie, estos dos compañeros no pasaban de los 4mm de altura así que tampoco los consideraremos como amenaza mortal para el bañista o buceador.