A pesar de no haber viajado en la mejor época del año, las inmersiones en Sal resultaron muy sencillas y bellas, con relativamente buena visibilidad y muy poca corriente. Solo en una de las inmersiones, la de Cavala, sobrepasé (por muy poquito tiempo) los 30m. El resto de inmersiones como las de Farol Fundo, Tres grutas, Pedras, y Santo Antao, cuyas fotos comparto hoy en este artículo fueron a poca cota aptas para no experimentados. De 16 inmersiones sólo repetí un punto de buceo (Santo Antao) y fue por petición mía, pues es un pecio que está a muy muy poquita profundidad (ideal para hacerla como segunda inmersión del día) y repleta de vida; muchos peces candiles colorados (Myripristis jacobus) y peces globos (Diodon holocanthus) e incluso tuvimos la suerte de ver un tiburón nodriza, aunque no pude acertarle con la cámara así que «no hay fotos, chicos».

En la próxima (y última) entrega sobre mis miniaventuras submarinas en Sal compartiré fotos de las dos últimas inmersiones que hice en Sal, las cuevas de «dos Ojos» y «Regona». Sin lugar a dudas fueron las que más me gustaron y quedé muy contento con todas las cositas que pude ver… Muy próximamente… No se la pierdan!!!!